se forjarán los nidos
poesía
DEMASIADO TARDE, BERTOLD
Primero se llevaron a los albañiles,
a los arquitectos,
pero yo no era ni lo uno ni lo otro,
y no me importó,
y les voté.
Luego emigraron los jóvenes,
por espíritu aventurero nos dijeron,
Pero yo no era joven ni aventurero,
y tampoco me importó,
y les voté.
Y comenzaron los desahucios.
Pero yo tenía mi casa
y dinero para limosnas.
Y me importó,
pero sólo un rato.
Más tarde vinieron las acampadas en las plazas,
Los llamaron perroflautas, comunistas,
y me lo creí,
y me asusté.
Y no los dejé pasar,
y me alegré,
aunque no sé bien por qué.
Después fueron a por los emigrantes,
porque nos estaban quitando el pan,
y los echaron
y los enjaularon,
y de nuevo los voté.
Luego supe lo de nuestras pensiones,
y subvenciones,
y traiciones.
Y caí en la cuenta, de Suiza.
Hoy ya lo sé,
no eran los míos, eran sólo suyos.
Pero ya no hay contenedores que hurgar
a pesar de tanta basura.
No sé cómo pasó,
por qué no lo vi.
Hoy sólo sé que
ya es demasiado tarde, Bertold.
A VECES ME CANSO
A veces me canso
de decirle a mis hijos que se laven las manos después de cagar,
que recojan los platos después de comer,
que hagan las camas.
A veces me canso
de escuchar gilipolleces de los que se jiñan con los cambios
de los que no les importa que les roben
porque sólo aguardan su turno.
A veces la vida es muy cansada,
al ver que siempre ganan los mismos
y lo único que nos dejan
es el reino de los cielos.
Foto tomada de encuentrame-sipuedes.blogspot.com
AIRE
Airean la pestilencia,
airean la infamia,
la demagogia airean.
con mis manos airean.
Purifican las palabras,
el sol y el aire
liberan y sanan.
Sol que apaga la náusea
de los mercenarios,
asesinos de certezas.
Aire que aventa exabruptos
de los lacayos,
sicarios del poder.
Verde vivo da la vida
a papeles muertos.
Sillas que levantan
Lázaros impresos.
Cada mañana, hechiceros
de la palabra,
indultan la libertad
Nigromantes sobre ruedas
alzan sus blancas chisteras,
y esfuman el hechizo
del desencanto.
Foto de Luis Manuel Guerra Bernal
EJÉRCITO DE SOMBRAS
Apagas los rescoldos que nadie quiso apagar,
sepultas la alborada que nadie quiso sepultar.
Ahogas la mirada, acribillas el alma.
Ejército de sombras que eclipsas la palabra,
estéril tu batalla, tus masacres, tu nada.
El sol caerá brillante sobre tu negra llama
y colmará de luces los bosques y las aguas.
Ejército de sombras, estéril tu batalla.
Tu lucha es infecunda y tu derrota mañana.
FLOTO
Mi corazón espeso flota en la oscuridad.
Dentro de un pozo flota, sostenido en la nada.
Bucea en el espacio, vaga por el vacío.
Navega en soledad como holandés errante.
Camino que se estrecha, espada que traspasa.
Mi cuerpo languidece, se esfuma en la tiniebla.
Se desliza en su vuelo, se evapora. Ya no es na…
VENGANZA
Entro en tu casa en cada telediario,
lacero tu alma al oír las noticias,
vomito en tu rostro bombas y sangre.
Exijo que empieces otra cruzada.
Déjate de cuentos, empuña tu arma,
los libros jamás ganaron batallas.
Arranca su ojo, escupe su diente
Bebe de mis aguas y calma tu sed
LA HISTORIA LA ESCRIBEN LOS VENCEDORES
Blancanieves envenenó a los enanos
antes de morder la manzana.
Se dejó besar por el príncipe
para que nadie sospechara.
Del espejito nunca más se supo
y menos de la madrastra.
Al príncipe convirtió en sapo
y al rey, en rana.
Viaja en calabaza
con zapatos de cristal.
No pruebes sus perdices.
Si la ves, escapa.
La ilustración se tomó de tediosfera.wordpress.com
SOMOS MÁS
Somos más, pero no nos temen.
No necesitan pólvora ni caballos.
Tienen la tele.
Cambia de canal.
Ya no traen cristalitos de colores,
sólo contratos precarios.
Y el móvil.
Mándame un meme.
No llevan cruces ni espadas,
dos leones les protegen
a la entrada de su casa.
Golazo de Cristiano.
No necesitan soldados,
ni armas pesadas.
Retuitea tu miseria,
comparte mi desesperanza.
Nos atraparon en su red,
nos convirtieron en spams.
Los amos irán al cielo,
y nosotros al carajo.
Somos más.
¿Alguna vez sirvió eso para algo?
Somos más. Gilipollas.
CUANDO HAYA MUERTO
“Cuando haya muerto, llórame tan sólo
mientras escuches la campana triste,
anunciadora al mundo de mi fuga
del mundo vil hacia el gusano infame.”
Cuando haya muerto no quiero lágrimas.
No quiero dioses, ni adioses,
ni nada.
Quiero alegría por haber vivido,
por haber reído y haber amado.
Cuando leas esto, recuérdame vivo
si me recuerdas vivo, estaré vivo,
y si muerto, muerto.
Cuando me veles, no quiero lágrimas,
no quiero penas, ansias, ni lamentos.
Quiero risas, quiero buenos recuerdos
como el día que enterramos a Asunción.
Cuando leas esto recuerda que quise
ser árbol en el desierto, humedal
entre pedregales.
Cuando leas esto, recuerda.
Si no lloras,
no habré muerto.